Entre partido y partido estará disponible un modo entrenamiento que nos permitirá mejorar las estadísticas que veamos más flojas para tener más opciones de victoria en el futuro. Incluso podremos competir contra amigos para ver quién obtiene mejores resultados. Además, estará también disponible una opción para disputar momentos concretos de la fase previa, como la ya famosa repesca entre Portugal y Suecia que encumbró a Cristiano Ronaldo hacia su segundo Balón de Oro.
A medida que avance el mundial se añadirán otros sucesos que podremos resolver en un solo partido cuando no queramos estar demasiado rato frente a la pantalla. Por último, el modo capitán nos permitirá controlar a un solo jugador y llevarlo paso a paso a levantar el preciado trofeo mundial de la FIFA. Eso sí, olvidaos de configurar torneos personalizados, los desarrolladores, por desgracia, no han incluido la opción.
La jugabilidad será similar a la del FIFA 2014, aunque se han pulido bastantes detalles. Habrá mucha más variedad de movimientos, más animaciones y se ha mejorado la física de los disparos a puerta, aumentando la potencia y la sensación de pesadez en el vuelo del balón.