La iglesia donde Michael Corleone hace su confesión en “El Padrino III” es Santa Maria della Querica, que a pesar de no tener un trasfondo complejo, es una de las estructuras más fantásticas que vemos en la pantalla. Esta escena aún es recordada con fervor gracias al uso de la fotografía y por la locación.
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Basílica de San Pedro, Ciudad del Vaticano
En un punto del ascenso de Michael, existe una conversación que sugiere que controlará el banco del Vaticano y aunque no fue filmado en locación, vale la pena mencionarlo, pues es un lugar digno de visitar sin importar las creencias religiosas. El acercamiento de la arquitectura según el diseño de producción resaltan las maravillas estructurales que existen en esa ciudad.
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La lista de lugares nos ayudará a conectar con la historia en la forma en que lo hacía el director, tratando de crear un vínculo irrompible en nuestras mentes. Para sentirnos como Vito Corleone, sólo nos queda empacar nuestras maletas y aprovechar de la época de ofertas y rebajas para reservar nuestro alojamiento empezando por un viaje a Italia…