Ten en cuenta que al correr todo tu cuerpo recibe los impactos de tus pies contra el suelo y unas zapatillas adecuadas ayudan a proteger desde los tobillos hasta la espalda de la tensión que generan estos impactos.
¿Qué zapatillas debo utilizar?
A la hora de elegir tus zapatillas para correr no deberías seguir simplemente el criterio de cuáles se consideran las mejores que hay en el mercado en la actualidad, sino que debes decantarte por las que mejor se adaptan a tus características y uso.
En primer lugar tienes que tener en cuenta tu peso. Se considera un corredor ligero aquel que está por debajo de los 80 kilos, mientras que un corredor pesado los supera. La relación del peso con la zapatilla se establece a través de la amortiguación: a más peso, más amortiguación. De esta manera, si eres un corredor pesado y tus zapatillas tienen poca amortiguación, el desgaste se acelerará, las zapatillas perderán pronto su calidad y por lo tanto aumentará el riesgo de lesión.