5. Viste acorde con tu silueta. Igual que harías en la calle, no te pongas cosas que no le quedan bien a tu cuerpo. Potencia tus atributos y no tus defectos, repetimos: por mucho que estés en el gimnasio. A nadie le gusta ver barrigas presas entre camisetas de lycra…
6. Los colores clásicos siempre son un ‘must’. Blanco, negro y azul ganan por goleada. Porque son discretos, bonitos y sencillos.