No son las curvas, son los signos
Moore también tiene varios consejos destinados a las mujeres, especialmente a aquellas que se sienten más inseguras con sus cuerpos. Al igual que ocurría con los hombres, no son las hembras simétricamente perfectas o voluptuosas las que llamaban más la atención del sexo opuesto, sino las que envían más señales a sus potenciales parejas. En concreto, aseguraba un estudio de la psicóloga, “las mujeres que mostraban más de 35 gestos de demostración a la hora conseguían que se les acercasen más de cuatro personas”. Además, la variedad de gestos también era crucial.
Cuantos más gestos se hagan y más variados sean, más hombres se sentirán atraídosPor el contrario, a aquellas mujeres que no hacían ningún gesto no se les acercaba ninguna persona. ¿Qué ocurría con las menos atractivas pero que sí mantenían un lenguaje corporal más elocuente? Que tenían más éxito que aquellas consideradas como guapas pero que, sin embargo, no hacían ninguno de los gestos que Moore considera como atractivos.