Las deficiencias específicas pueden ocurrir sólo bajo ciertas condiciones patológicas, trastornos o malos hábitos dietéticos (dieta vegana, frutista, crudista, etc.) prolongadas durante largos períodos de tiempo.
Otro factor limitante, a menudo pasado por alto, es la ingesta calórica total: si la dieta es muy baja en calorías, buena parte de los aminoácidos se utiliza para producir energía y el balance de nitrógeno puede llegar a ser negativo.
Niños y atletas necesitan un mayor aporte de proteínas respecto al resto de la población. Estas necesidades mayores pueden, sin embargo, ser cubiertas simplemente aumentando la ingesta calórica total. Un argumento similar puede hacerse para las nodrizas o las mujeres embarazadas, donde las proteínas, dada su función plástica, tienen una importancia fundamental.
Para tomar cantidades adecuadas de aminoácidos esenciales, la mayoría de los nutricionistas recomienda consumir una cantidad diaria de proteínas igual a un 10-20% de las calorías diarias (un gramo de proteínas es equivalente a 4 Kcal o 17 kJ) o bien 1-1,5 gramos por kg de peso corporal.