Según nos explica, tras un exposición solar durante unas horas pueden producirse “efectos inmediatos como la inflamación de la córnea y la conjuntiva, sensación de lagrimeo, picores”. A largo plazo, la gente que está expuesta con frecuencia al sol puede llegar a tener “serios problemas, como lesiones oculares o cataratas”, añade.
Gafas de sol homologadas
Queda claro, por lo tanto, la importancia y necesidad de usar gafas de sol, de manera que no deberíamos comprárnoslas a la ligera. Siempre tenemos que asegurarnos que estas gafas están homologadas y cumplen la normativa de calidad y seguridad.
“La mejor opción es acudir a un establecimiento sanitario autorizado de óptica, ya que disponen de los medios técnicos necesarios para comprobar y garantizar que las gafas de sol cumplen los requisitos normativos”, señala Masiá.
Además, hoy en día, el etiquetado normativo no siempre garantiza que sea oficial. “Igual que se falsifican las marcas, también se hace con la etiqueta”, destaca el especialista en relación a la venta de imitaciones, dudosamente homologadas y, por lo tanto, perjudiciales para la propia salud ocular.