Los botones, en el lado lateral derecho, disponen de un acabado antideslizante para que pueda utilizarse con guantes, y la correa está hecha de plástico de uretano para ajustarse a la muñeca.
Además de las apps de Casio instaladas por defecto, los usuarios pueden cargar sus propias apps para, de esta manera, ampliar las funciones según el tipo de actividad que quieran realizar.
Casio todavía no ha especificado la fecha de lanzamiento del smartwatch, que sin embargo saldrá al mercado en cuatro colores: naranja, verde, negro y rojo y con un precio variable «de entre 50.000 yenes (392 euros o 421 dólares) y 60.000 yenes (470 euros o 505 dólares)».
