Nos sorprendió encontrarnos en la llamada mid season —un periodo a priori de baja calidad creativa donde algunas ficciones irán destinadas al cajón desastre— con una serie con tanto potencial como Empire.
Quizás es pronto para decirlo, pero Empire tiene todas las papeletas para convertirse (por méritos propios) en uno de los mejores estrenos de la temporada.
Pocos sabían qué nos deparaba la nueva serie de FOX, de hecho algunos ni le habíamos prestado atención hasta ver el revuelo causado. La trama parecía una mezcla entre ‘Glee’ y ‘Nashville’ sustituyendo a los adolescentes estúpidos y las cantantes de country por un imperio de la música consistente. A simple vista no llamaba la atención y a simple vista estábamos equivocados.
Empire no es una serie de música más. La ficción arranca con la salida de la cárcel de Cookie, uno de los personajes más característicos, está bien construido, es sexy, con carácter y busca sus objetivos sin esconderse.