Los sapiosexuales utilizan el concepto de inteligencia erótica. Olga Gallardo, terapeuta sexual y de pareja, asegura que esto no es más que el juego de dos mentes: «La conversación se convierte en un juego sexual, les gusta la sorpresa o lo inesperado y dejan espacio entre ellos para que surja el deseo y se mantenga el misterio». Y es que, no hay que olvidar la importancia del cerebro en el sexo, ya que, según recuerda Emma Ribas, «los órganos genitales dependen en gran medida de nuestro cerebro».