Para encontrar las bacterias que pudiesen tener efecto sobre el rendimiento de los atletas, los científicos recogieron muestras fecales de 20 atletas entrenando para el maratón de Boston de 2015, todos los días una semana antes de la carrera hasta una semana después. La idea era hacer un seguimiento de los cambios en el microbioma durante los entrenamientos y en la recuperación.
Los investigadores secuenciaron el genoma de las bacterias recogidas para determinar de qué tipo era. Cuando compararon las muestras de antes de la carrera con las de después, encontraron un pico en la población de un tipo determinado de bacterias después del maratón.
Bacterias implicadas con el ácido láctico
La función específica de esta bacteria es descomponer el ácido láctico, que el cuerpo produce en cantidades mayores de lo habitual durante un ejercicio intenso. Esto puede producir fatiga muscular y dolor, algo para lo que esta bacteria en cuestión podría ser un remedio, al menos parcial.