También existen otro tipo de dietas cuyo objetivo es prevenir o hacer frente a una enfermedad, como las dietas bajas en sal para hipertensos, dietas específicas para celíacos, dietas para diabéticos, etc. A grandes rasgos podríamos decir que cada persona requiere una dieta, teniendo en cuenta aspectos tales como la edad, la altura, el peso o la condición física.
Si vas a ponerte a dieta, te recomendamos que antes sigas las siguientes indicaciones:
- Hazte un chequeo médico para ver cuál es tu estado de salud y qué tipo de dieta necesitas.
- Si vas a hacer una dieta para conseguir objetivos estéticos como ganar músculo o perder grasa, te sugerimos que hables con un nutricionista o médico deportivo para que te oriente sobre qué alimentos debes tomar.
- Evita a toda costa las «dietas milagro», o aquellas que se basen únicamente en excentricidades como tomar durante una semana un único tipo de alimento. Un organismo sano necesita una dieta variada y equilibrada, y ello implica obtener los nutrientes de muchas clases de alimentos diferentes.
Si estás o decides ponerte a dieta, debes ser constante para obtener los beneficios que esperas de ella. Sabemos que para algunas personas seguir una dieta de forma estricta puede suponer un gran esfuerzo mental y físico, y que finalmente este sacrificio se puede traducir en que el individuo caiga en un estado de ansiedad, haciendo que la dieta, más que una ayuda, sea contraproducente para el organismo.