Particularidades y normas de empresa a parte, hay unos cuantos tips que siempre quedan bien a la hora de vestirnos para un viernes casual. Escoger unos pantalones chinos o unos vaqueros clásicos (oscuros y sin rotos o descosidos) es acierto seguro. Lo más importante será la elección de la camisa, que se llevará abierta y sin corbata. Se puede, por tanto, arriesgar un poco con estampados más modernos y colores un poco más atrevidos.
Un polo también es una opción interesante, sobre todo de cara a la temporada primavera/verano. En cuanto al calzado, tenemos la suerte de que las zapatillas están de moda y actualmente se combinan incluso con looks formales. Si hace un tiempo nos parecía una locura ir a la oficina en bambas, ahora es pura tendencia. Aunque, si esto te parece pasarse, siempre puedes optar por unos náuticos o unos loafers.
Porque salirse de la rutina, también en cuestión de ropa, siempre gusta.