Para dar forma a las galletas fitness, nos enharinamos las manos y hacemos bolitas.
En un plato colocamos una hoja de papel vegetal, si no tienes puedes poner un poco de aceite y retirar el exceso con una servilleta de papel. Sobre el plato aplastamos las bolitas para dar forma a las galletas fitness. Calentamos un minuto en el microondas a 700 – 900 vatios y ¡ ya están listas nuestras galletas!
La espera para comer las galletas es corta, se enfrían enseguida pero si no tenéis espera se pueden comer templadas, personalmente me gustan más!
Con estas cantidades os saldrán unas 8 galletas que podéis consumirlas en varias veces. No necesitan estar guardadas en nevera para su conservación, en un plato tapadas con un paño a temperatura ambiente es suficiente.
Fuente: MyProtein