No te obligan a hacer nada. Tienes miedo de no poder decir que ‘no’ cuando la situación lo requiera. No hay de qué preocuparse. «La gente está acostumbrada a pedir permiso antes de hacer nada. Sin consentimiento no se hace nada. Yo me siento mucho más segura en una de estas fiestas que en un garito normal», relataba B.
Puedes ir como voyeur: si la curiosidad te mata, pero solo quieres mirar, puedes hacerlo. «Nadie está obligado a entrar en el juego. La gente puede ir a mirar, conocer gente», asegura C, quien puntualiza que sí puedes ir de voyeur siempre y cuando seas respetuoso y mantengas las distancias adecuadas con la gente que sí está intimando.
Fuente: elconfidencial.com