Es importante tener en cuenta que la nutricosmética no hace milagros y requiere constancia. Para notar sus efectos, tendrás que seguir al menos dos o tres meses de «tratamiento» y siempre tendrás que acompañarla de hábitos saludables e incluso completar su acción con otros tratamientos (o cosméticos) de la estética «tradicional».
Por último, el asesoramiento médico o farmacéutico antes de probar los beneficios de la nutricosmética es más que aconsejable.