Con el techo puesto, nada hace pensar que nos encontramos en un cabrio, ni por nivel sonoro exterior, ya sea mecánico o aerodinámico y de rodadura, que está muy bien aislado, ni por el aislamiento térmico, ya que no hay variación muy evidente con otro tipo de vehículos. Unas de las características de este vehículo es que no tenemos pilar B, pero si tenemos cuatro elevalunas.
Podemos circular con o sin techo y con los elevalunas subidos o bajados. Circular con el techo y los cristales bajados, los cuatro, produce turbulencias, sobre todo en las plazas traseras, que a cierta velocidad, pasados los 120 km/h los pasajeros de esas plazas llegaran a estar incómodos. Pero lo más asombroso es lo bien que vamos en un día con frío de verdad, con el techo quitado. Como mostramos en el vídeo de la prueba, podemos circular sin problemas e incluso con confort climático en un día muy frío.