Una pechuga de pollo también tiene 284 calorías, o 165 calorías por cada 100 gramos. El 80% de las calorías proviene de las proteínas, mientras que el 20% procede de la grasa.
Esta parte del pollo es popular entre los culturistas y aquellos que quieren perder peso. Su alto contenido de proteína y su bajo número de calorías es un motivo para comerlo sin preocupación.
2. Muslo
El muslo de pollo es otra parte muy común y es ligeramente más barato que la pechuga de pollo. Un muslo de pollo cocinado, deshuesado y sin piel tiene alrededor de 52 gramos y 13,5 de proteína. Esto equivale a 26 gramos de proteína por cada 100 gramos.
Esta parte del pollo también aporta 109 calorías por muslo, o 209 calorías por cada 100 gramos. El 53% de las calorías proviene de las proteínas, mientras que el 47% de la grasa.
Curiosamente, los muslos tienen un color ligeramente más oscuro que la pechuga. Esto se debe a que las piernas del pollo contienen más mioglobina. Esta molécula ayuda a proporcionar oxígeno a los músculos activos, dándoles una apariencia más roja. Incluso, algunas personas encuentran que la oscuridad de los muslos de pollo les da un sabor más suculento.