La velocidad y la fuerza también son definitivas. No se trata de prohibirte movimientos, sino de tener cuidado Parece que la postura clásica por excelencia, la del ‘misionero’, con el hombre encima, es la más segura.
No todas las víctimas de este problema estaban haciendo algo tan agradable. En un caso del que informa ‘BBC‘ un hombre se cayó de la cama mientras tenía una erección nocturna (un fenómeno no necesariamente relacionado con sueños ni ningún otro motivo de excitación sexual) y se golpeó con el mismo resultado.
Hay que tener en cuenta que esta es la postura más peligrosa de las habituales, no de todas. Lógicamente, cualquiera que suponga forzar al máximo el ángulo de curvatura (por ejemplo, la mujer sentada encima pero de espaldas al hombre, o de lado) es más peligrosa. Quizá las preferencias más extendidas de los hombres se deban sobre todo a esto, a una huida instintiva del dolor.
La velocidad y la fuerza también son definitivas. No se trata de prohibirte movimientos, sino de tener cuidado. No fuerces el miembro para acelerar el fin de una erección inconveniente, por ejemplo. No te masturbes de forma agresiva o con prisas. Manipúlalo con cierto cuidado y no sobreestimes su flexibilidad.
¿Y si pasa?
En cuanto notes el dolor y la pérdida repentina de la erección, debes aplicarte hielo (nunca directamente sobre la piel) y hacer que te vea un médico. El facultativo suele recetar analgésicos y antiinflamatorios, pero nos tememos que si la hinchazón y el hematoma son debidos a una fractura grave lo más probable es que necesites cirugía.