Cuida tu postura al correr

0
673

Una mala postura o pisar mal al correr puede derivar en dolores de espalda, daño en las articulaciones (producidas por un impacto excesivo), lesiones en cuello y cervicales, esguinces y torceduras por apoyar mal el pie…

Es importante señalar que cada uno tiene su «estilo» de carrera y en este tema hay cierta flexibilidad. Cada deportista debe conocer su cuerpo y ver, en la práctica, cómo se siente más cómodo a la hora de hacer kilómetros con sus zapatillas puestas.

El ritmo, la velocidad o la zancada las marcas tú pero, respecto a la postura, hay una serie de puntos importantes que siempre hay que respetar.

  • Cabeza, cuello y mirada. La cabeza ha de estar erguida, recta, en su posición natural y en simetría con el tronco. La barbilla pegada al pecho o la mirada «al cielo» son dos errores habituales que hay que evitar. El cuello tiene que estar firme, con el movimiento mínimo, pero sin rigidez y en cuanto a la mirada, lo ideal es «vista al frente», aunque hay corredores que prefieren mirar al suelo. Si éste es tu caso, recuerda no fijar la vista justo en los dedos de tus pies. Puedes mirar hacia abajo ( sin bajar la cabeza) pero siempre dirigiendo la mirada al menos 5 metros hacia adelante.
  • Tronco. El core es tu centro de gravedad, de él depende tu estabilidad y debe permanecer inalterable para ser el punto de equilibrio que contrarreste la propia acción de correr (brazos y piernas en movimiento). Intenta ir lo más recto posible, aunque una leve desviación hacia adelante o hacia atrás no implica mala postura (se trata de correr con comodidad). Lo que sí hay que evitar es el balanceo a derecha e izquierda y por supuesto, cualquier giro o rotación mientras corres. Contraer ligeramente abdominales y glúteos te ayudará a mantener una postura óptima y el tronco «en su sitio».

[/nextpage]

[nextpage]

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.