¿Es realmente la pornosexualidad una tendencia sexual o una forma de enmascarar el miedo a las relaciones? La pornosexualidad es, por tanto, un fenómeno emergente en que la orientación sexual del individuo está vinculada solamente a la pornografía.
La pornosexualidad no es una orientación sexual comparable a ser heterosexual o bisexual pues, en este caso, el placer sexual no se deriva de una persona «real», cara a cara. Cierto es que ver pornografía es una forma útil de explorar y aprender sobre los deseos sexuales, pero la moderación es clave. Demasiado puede sesgar el equilibrio y volver insensible cuerpo y cerebro, escogiendo finalmente la opción del porno como reemplazo del sexo en la vida real.
«Puesto que toda su gratificación sexual es la gratificación de uno mismo, nunca han aprendido las clases de habilidades sociales para formar relaciones sanas e íntimas,» explica Lawrence Siegel, sexólogo clínico y consultor de educación sexual en los Institutos Modernos de Terapia Sexual.