Dado que son muchas las que tardan más llegar al clímax que sus parejas, la aparición de un vibrador en escena no sólo puede impulsar el placer de estas sino que, especialmente en determinadas posturas en las que el clítoris parece no existir, puede asegurar que tengan un orgasmo intenso y duradero. Prueba a introducirlo entre los dos cuerpos, de tal forma que su vibración se note un poco más abajo del pubis, cuando esté acercándose el momento.
Multiplica el placer
En la mayor parte de los casos, cuando las mujeres están al borde del orgasmo, el clítoris se vuelve muy sensible. Si en ese preciso instante se estimula de forma suave y permanente apretando sus labios vaginales, no sólo se consigue un orgasmo mucho más intenso y duradero, podemos doblar la cantidad.
El conocido como el ‘sándwich del clítoris‘, es la mejor estrategia para conseguir que el primer orgasmo no se quede solo. “Una de las mejores cosas que aprendí de un viejo amante es que al apretarme los labios y moverlos, alcanzaba un segundo orgasmo rápidamente y si seguía haciéndolo la cantidad aumentaba”, explica una de las participantes en una macroencuesta recientemente realizada por OMGYES y el Instituto Kinsey. “No es el método definitivo, pero un número importante de mujeres asegura que así consiguen múltiples orgasmos seguidos sin necesidad de un periodo de recuperación”, aclaraba Hannah Smothers en ‘Cosmopolitan’.
Quien tiene boca, se equivoca (o no)
Que sí, que es fenomenal comunicarse y decirse cosas bonitas, amorosas y calientes, pero si hay algo que verdaderamente conduce a orgasmos duraderos e intensos para ellas es una buena ronda de sexo oral. “Si hablamos de dar placer a una mujer, los hombres deben hablar el lenguaje del amor: el cunnilingus”, bromea el sexólogo Ian Kerner en ‘Ask Men’. Incluso la estrella porno Ron Jeremy –famoso por tener un miembro viril de unos 25 centímetros– asegura que ha conseguido que más mujeres alcancen el orgasmo gracias a su lengua que a su pene.