Uno de los elementos que debemos valorar con más detenimiento a la hora de escoger nuestras zapatillas para hacer deporte es su suela. Para elegir la adecuada lo primero que debemos plantearnos es el terreno en el que vamos a practicarlo. Si no somos deportistas profesionales y sin entrar en deportes más específicos, lo más usual para ponernos en forma es recurrir a un gimnasio o practicar el running. Incluso es muy habitual combinar ambas actividades.
Si tu actividad física va a limitarse al gimnasio, no es necesario ser demasiado exigente con el tipo de suela. Elige unas zapatillas de suela convencional, más bien blanda, preparada para superficies duras, bastante plana y con buena amortiguación.
Este mismo tipo de suela puede emplearse para correr por asfalto. Así que si eres un urbanita al que le gusta entrenar en un gimnasio y salir a correr por la ciudad, ésta es tu suela de zapatilla adecuada.