Cada vez que oímos la palabra microbio nos imaginamos a un virus o bacteria intentando atacar a nuestro cuerpo para causarnos algún tipo de daño con el que poder beneficiarse.
Pero esta imagen de los microbios está muy lejos de la realidad.
Es cierto que hay un largo listado de microorganismos que pueden causar alguna enfermedad más o menos grave o más o menos duradera, como por ejemplo la gripe, el VIH o la tuberculosis, pero también es cierto que si no fuera por otros muchos no podríamos vivir, o por lo menos cómo lo hacemos.
Decir que nuestro cuerpo está lleno de microorganismos no es ninguna exageración.
Para que te hagas una idea, el cuerpo humano adulto contiene 10 veces más células de microorganismos que de humano, los cuales pueden pesar tanto o más que nuestro cerebro (unos 1350 gramos).
Veamos unos números extraídos de un estudio publicado por National Geographic.