Seguidamente, continúa con los laterales. Partiendo de la zona superior de la oreja, estira tus dedos lentamente mientras subes hacia la parte alta de la cabeza. Incide en las sienes realizando círculos concéntricos para aumentar la sensación de relax.
Como tercer paso, realiza, con las yemas de los dedos, pequeñas presiones en el área de la frente, justo en el nacimiento del cabello. Ve descendiendo, con ambas manos (una hacia la derecha y otra hacia la izquierda) bordeando frente y sienes mientras presionas. Repite el movimiento pero en sentido ascendente.
Para terminar, prolonga estas suaves presiones con los pulgares por detrás de las orejas (ambos dedos deben unirse a la altura de la nuca).
Si te ha gustado la experiencia, repítela dos veces por semana (puedes darte un automasaje o practicar la técnica con tu pareja), en cualquier caso, ganarás bienestar general y salud capilar.
