El masaje con piedras, calientes y frías, forma parte de la llamada geoterapia y es una técnica terapéutica milenaria que aporta múltiples beneficios para la salud y el equilibrio interior.
[pullquote]Su principal objetivo es eliminar tensiones y conseguir relax total ayudando a aliviar dolores musculares[/pullquote]Su principal objetivo es eliminar tensiones y conseguir relax total ayudando a aliviar dolores musculares (contracturas, agarrotamiento, inflamación…) y también «dolores» más difíciles de detectar (estrés, ansiedad, insomnio…)
Estos masajes se realizan en centros de estética, spas y balnearios que incluyen entre su oferta de servicios terapias alternativas de carácter holístico, aquellas destinadas a tratar al ser humano en todos sus aspectos: físicos y psíquicos.
Para el masaje con piedras calientes se utilizan generalmente rocas de origen volcánico, lisas, densas y oscuras, de gran poder magnético dado su alto contenido en hierro. Estas piedras se calientan en un horno y pueden llegar a alcanzar los 50ºC – 60ºC reteniendo el calor en su interior durante horas.