Todo en este mundo debe tener un equilibrio, y lo mismo sucede entre el vino y la comida. No se trata de una elección al azar, sino de que seas un verdadero conocedor de cómo pedir el vino adecuado, acorde al tipo de alimentos que vayas a consumir. Esto no solo te hará disfrutar al máximo tus comidas, sino que te hará lucir como todo un hombre de mundo… y te vamos a revelar un secreto: ¡eso le encanta a las mujeres!
Primero lo primero: al arte de combinar un platillo con algún alimento, con el objetivo de potenciar los sabores, se le llama maridaje. Una mala elección del vino te podría llevar a opacar el sabor de la comida, o incluso, puede generar un sabor desagradable al momento de combinarlos.
Anteriormente se elegía un vino y en base a esa elección se desarrollaba el menú, pero hoy en día es al revés: se presenta un menú, se eligen los platillos, y en base a eso se decide qué vino servirá para acompañar los alimentos.