Saber hacer reír a la gente no es tarea fácil y tampoco es algo que consiga hacer todo el mundo. Un estudio de la británica Universidad de Oxford cree haber descubierto el secreto que une a cómicos, payasos y monologuistas: la posesión de rasgos asociados a una personalidad psicótica.
Gordon Claridge, director de la investigación, asegura: «Los elementos creativos necesarios para producir humor son sorprendentemente similares a los que caracterizan el estilo cognitivo de las personas con esquizofrenia o trastorno bipolar«.
Para el estudio, publicado en el British Journal of Psychiatry, se analizó a 523 humoristas (404 hombres y 119 mujeres) procedentes de Australia, Gran Bretaña y Estados Unidos. Éstos, completaron un cuestionario que fue comparado con las respuestas de otros dos grupos: uno formado por 364 actores y otro de 831 personas sin trabajo creativo.
Las puntuaciones obtenidas por los cómicos fueron más altas en cuatro características psicóticas: experiencias inusuales, desorganización cognitiva, anhedonia introvertida y disconformidad impulsiva.