España en la portada del periódico The New York Times, pero esta vez no por la corrupción o la crisis económica. El diario, uno de los más leídos e influyentes del mundo, ha puesto en debate los horarios españoles, diferentes al resto de países europeos.
Los puntos más discutidos en el reportaje incluyen costumbres tan españolas como hacer la siesta, cenar a partir de las diez de la noche o ver la televisión hasta bien entrada la madrugada. Uno de los protagonistas del artículo lo justificaba como «es la identidad española, comer en otro horario, dormir en otro horario».
Así pues, el periódico sostiene que un cambio horario en España cambiaría la eficiencia del país y resalta varias razones económicas para igualar nuestros tiempos a los de los europeos.
Algunas de las reformas que propone The New York Times son: retrasar una hora las agujas del reloj para igualarlo al del Reino Unido, Portugal y Canarias, cambiar los horarios de trabajo para situarlos entre las 9 de la mañana y las 5 de la tarde o adelantar el prime time televisivo para que los programas empiecen y acaben antes.