Así, el mito de que las calorías son lo que más importa para el peso (y la salud) es completamente equivocado.
4. Hay que usar aceites vegetales poliinsaturados para cocinar
Comúnmente se aconseja el consumo de aceites de semillas y vegetales que son altos en grasas poliinsaturadas.
Estos aceites, incluyendo el de soja, maíz, canola y de semillas de algodón, han mostrado en algunos estudios tener niveles de colesterol bajos.
Sin embargo, que algo baje el colesterol no significa necesariamente que pueda prevenir la enfermedad cardíaca en sí.
El colesterol es un factor de riesgo, pero hay otras cuestiones peores (como ataques al corazón y la muerte) que importan mucho más. De hecho, hay un buen número de estudios que demuestran que, a pesar de ser bajos en colesterol, estos aceites incrementan el riesgo de enfermedades del corazón.
Además, estos aceites son dañinos por un buen número de otras razones. Están llenos de grasas poliinsaturadas, pero muchas de ellas son Omega – 6. Los humanos necesitamos comer ácidos grasos Omega – 6 y Omega – 3 con un cierto balance, el cual no se tiene si se toma demasiado de estos aceites.