¿Se puede amar la libertad y la democracia y ser monógamo estricto? ¿Es siquiera moral el matrimonio? Si te gusta ir por libre y ‘épater le bourgeois’, aquí tienes un clásico básico.
5. ‘Mi jardín secreto’, Nancy Friday
Un hito que sigue inspirando textos y usándose como ejemplo a pesar de haberse escrito hace cuarenta años. Desvela las principales fantasías sexuales femeninas en una época en la que apenas se hablaba de ellas, a través de testimonios directos de amigas y entrevistadas por la autora. Fantasías de sumisión y dominación, exhibicionismo, fetichismo, incesto…
Recibió un premio de la American Association of Sexuality Educators, Counselors and Therapists por poner de manifiesto los ataques que recibe toda información relacionada con el sexo en las instituciones americanas.
6. Si te interesa el sexo tántrico pero no eres ningún monje sino un urbanita moderno, Barbara Carrellas ha pensado en ti: el ‘País de las libertades’ es también de los más timoratos en cuestiones de censura relacionada con lo sexual: los cómicos tienen que confeccionar sus chistes según las normas restrictivas de Comedy Central, hay leyes vigentes que protegen los valores religiosos contra la libertad de expresión del resto, se persiguen los métodos anticonceptivos y tener librerías sobre sexo o locales de intercambio de parejas es dedicarse a negocios de riesgo.