La sexóloga estadounidense Laurie Watson publicará la semana que viene su nuevo libro, Wanting Sex Again, en el que explica, tal como aparece en su portada, como “reedescubruir el deseo y arreglar un matrimonio sin sexo”. En él aporta una serie de consejos para despertar la libido de las mujeres, que pueden ser útiles para cualquier tipo de pareja que busque incrementar su frecuencia sexual.
1. Lee, imagina y planifica
Roberto Sanz, sexólogo de la Fundación Sexpol, explicaba en un reciente reportaje de El Confidencial que el sexo no tiene porque ser siempre espontáneo, algo que, de hecho, es muy difícil de lograr más allá de los primeros meses de noviazgo. La realidad, explicaba Sanz, es que “el ser humano ha adoptado toda su vida unos ritmos y unos rituales y el sexo se puede organizar de la misma forma que las comidas”. En definitiva, el deseo se puede provocar conscientemente, planificando los momentos en los que se quiere tener relaciones sexuales –apagando la tele para, por ejemplo, preparar una cena romántica–, probando nuevas experiencias –¿por qué no hacerlo en la cocina?–, y, en definitiva, estando abiertos a nuevos consejos.
2. Trabaja los preliminares
Como apunta Basson en su estudio, muchas mujeres dan cabida a las relaciones sexuales sin tener un verdadero deseo, pero si las cosas se hacen bien, este acaba apareciendo. A muchos hombres les cuesta aceptar que sus mujeres hagan el amor solo por complacerles, pero eso es una verdad a medias: aunque parezca contradictorio, el hecho de que muchas mujeres no sientan deseo al comenzar un intercurso sexual no significa que no quieran tenerlo, sino todo lo contrario. ¿Por qué no enfocar nuestros esfuerzos en que el deseo acabe apareciendo? Esto se logra alargando los preliminares, siendo cariñoso y retrasando el momento del coito hasta que la mujer esté realmente excitada. Si se hace bien, Watson asegura que “el sexo puede acabar siendo salvaje y apasionado”, pues cuanto mayor es la excitación a la que se llega, más placentero es el orgasmo.
3. Muestra satisfacción y apuesta por lo que le gusta
Con los estímulos táctiles y eróticos la mujer empieza a centrarse en el sexo. Si en el pasado inmediato las relaciones han sido placenteras, entonces empezará a tener sentimientos positivos. Pero si no, le será más complicado disfrutar del sexo. Es por ello que debemos tratar de mostrarnos siempre optimistas en nuestras relaciones, mostrando satisfacción y agradecimiento, lo que hará que los siguientes coitos funcionen mejor. En definitiva, tal como explica Watson, “la mujer sentirá que el esfuerzo merece la pena”. Esto incluye fomentar las prácticas que funcionan y evitar las que no lo han hecho. Y esto varía en cada pareja.