Pese a no ser malas per se, hay muchas otras que se quedan a medio camino entre la decepción y el placer culpable: son por ejemplo ‘Dominion’, ‘The Night Shift’, ‘Extant’ o ‘The Last Ship’. Otras como ‘Helix’, ‘The Strain’ o ‘The Leftovers’ las veo demasiado sobrevaloradas para lo que fueron en realidad: series normalitas con cierta gracia.
En la temporada actual también existen series que no merece la pena casi ni nombrar. ‘Girls Meets World’ (sólo aguante 7 minutos), ‘Cristela’, la adaptación estropeada de ‘Pulseras Rojas’ o ‘Constantine’ son algunas de ellas. Del resto tendremos que esperar para saber cómo evoluciona aunque muchas de ellas irán directamente a la hoguera.
Si pasamos a territorio español, tenemos unas cuantas ficciones de las que deberíamos olvidarnos rápidamente. Mientras ‘El Príncipe’ y ‘Sin Identidad’ destacaron con cierto grado de cordura en sus argumentos; lo contrario ocurrió con ‘B&B’, ‘Bienvenido al Lolita’, ‘Dreamland’, ‘Hermanos’ o la recién estrenada ‘Gym Tony’. No merece la pena ni ponerte un segundo episodio.