Muchas personas creen que la cavitación hombres es un procedimiento nuevo, pero en realidad no es así.
La cavitación tiene un principio físico, que en realidad es antiguo, practicado como terapia para relajar o para estimular el drenaje linfático. Su uso para el adelgazamiento surgió como una consecuencia que se detectó con el paso del tiempo.
En un principio, se daban masajes profundos, ayudados con aceites como el de naranja, pero no se relacionaba la pérdida de peso con este tratamiento. Solo hasta tiempo después, se comenzó a ver que los masajes influían en la pérdida de peso.
Este tratamiento se continuó practicando por mucho tiempo, pero solo hasta hace poco se logró dilucidar por qué funcionaba. Se concluyó que era posible la degradación de la membrana de las células grasas: la grasa queda suelta, lo que facilita que se pueda manipular en cierta forma, depurar a través del drenaje linfático y evacuarla mediante funciones naturales de excreción.