La arginina es un aminoácido que se encuentra en las proteínas de alimentos como el pescado azul, carnes rojas, lácteos o frutos secos. Participa en numerosas reacciones de nuestro mundo interior llegando a desencadenar, supuestamente, una serie de repercusiones que más tarde estudiaremos.
[pullquote]Los últimos estudios ponen en tela de juicio la eficacia de la suplementación de L-arginina en el rendimiento deportivo[/pullquote]Este aminoácido se comporta como un material indispensable para la síntesis de óxido nítrico, y creatina, y cumple un efecto estimulante sobre la hormona del crecimiento y la insulina. Estas acciones fisiológicas tan prometedoras son las que ha utilizado la industria de la suplementación para convertir a la L-arginina en una de las sustancias más vendidas de la última década.
Se ha especulado tanto sobre este complemento alimenticio que el boca-oreja ha provocado que multitud de entrenadores “receten” arginina a sus pupilos para mejorar su recuperación después del ejercicio, su resistencia aeróbica y su fuerza muscular. Por tanto y en teoría, la suplementación con L-arginina promete una mejora en el rendimiento del deportista.