Cuando salió al mercado la nueva XBOX One no todo fueron alabanzas para la máquina de Microsoft. Hubo diversos factores que no agradaron a los usuarios y que suscitaron fuertes críticas, hasta el punto de forzar a sus creadores a realizar algunos cambios. Uno de esos puntos de fricción entre clientes y desarrolladores fue el nuevo Kinect 2.0.
[pullquote]El juego para XBOX One añade otros tres deportes que sacan partido a las nuevas características del Kinect 2.0: escalada, motos acuáticas y tiro al blanco[/pullquote]El Kinect, como muchos ya sabréis, es el controlador de juego mediante detección de movimiento y voz, sin necesidad de mandos o cables. Es el equivalente al Wii MotionPlus de Nintendo o al PlayStation Move de Sony.
La ventaja de Kinect respecto a sus competidores es que no hay mando, ya que el sensor detecta directamente los movimientos del jugador. Esta versión 2.0 sustituye a la anterior de la XBOX 360.
La crítica de los usuarios viene dada por la obligatoriedad de tener permanentemente activado el Kinect, ya que la nueva XBOX incluye la opción de navegación por su interfaz mediante comandos por voz o pulsando botones en el aire, y por la falta de privacidad que conlleva el tener una cámara y un micrófono permanentes en el salón de casa, sobre todo sabiendo que Microsoft lleva un registro de actividad de la consola.