“Para prevenir estas enfermedades, los adolescentes necesitan apoyo y ayuda de los adultos, padres y educadores, en todo lo que se refiere a educación sexual e información para evitar conductas de alto riesgo en las relaciones sexuales. De hecho, los jóvenes entre 15 y 24 años representan el 50% de las personas que son diagnosticadas de ETS cada año y un 25% de ellos son portadores del virus del papiloma humano (VPH). Solo a través de la educación precoz podremos tener adolescentes informados y conseguir reducir las cifras de ETS”.
Asimismo, durante la ponencia ‘Riesgo frente al VPH: piénsalo de nuevo’, a cargo de Alejandro Orrico, farmacéutico del área de Investigación en Vacunas de FISABIO y profesor asociado de la Universitat de València; se ha incidido en que “el VPH es el virus de transmisión sexual más frecuente en todo el mundo y es causa sine qua non para el desarrollo de cáncer cervical, el segundo más frecuente en las mujeres menores de 45 años en nuestro país”.