Los cortes más trendy de esta temporada son los cortos y rizados. El más top, una cascada de rizos sueltos y manejables, con raya a un lado y que caiga hacia el contrario (preferiblemente el izquierdo). Siempre sin demasiada precisión, ¡el desorden es bello!
Además, el corto es la solución ideal para cabellos poco rizados o que no permiten jugar con volúmenes. Un styling perfecto y fácil de estructurar con un simple toque de gel, siempre de texturas ligeras.
Otra opción para todos aquellos que no tengan unos rizos perfectos es rasurar los lados y dejar todo el protagonismo del cabello delante. El tupé se lleva, y de todas las maneras posibles: despeinado, lateral, hacia atrás… Lo importante es que sea el absoluto protagonista. Eso sí, ya sea en liso o en rizado, son indispensables los productos de fijación: lacas, ceras o geles extra fuertes no deben faltar nunca en tu neceser. ¡Puro estilo rockabilly!