La pobre Sarah, de 28 años, se ha cruzado con alguno de estos piezas: «A ver, en teoría me gusta hablar sucio, pero la realidad es muy diferente. Cuando un hombre te llama así en realidad no es tan gracioso».
Fuente: El confidencial
La pobre Sarah, de 28 años, se ha cruzado con alguno de estos piezas: «A ver, en teoría me gusta hablar sucio, pero la realidad es muy diferente. Cuando un hombre te llama así en realidad no es tan gracioso».
Fuente: El confidencial