“Los calambres son poco comprendidos en comparación a los aspectos más comunes como la deshidratación, inestabilidad electrolítica o incluso una fatiga neuromuscular. Cada quien debe hacerse cargo de su hidratación y nutrición individualmente, pero lograr que tus músculos sean a prueba de fatiga puede llevarte un largo camino de entrenamiento para evitar los calambres mientras estás pedaleando más fuerte de lo normal. Cuanto más grande y más fuerte el músculo es, más fibras puede reclutar en tiempos de necesidad” agrega Pruitt.
Conclusión
Los deportistas en general, y particularmente los ciclistas pueden evitar los calambres siguiendo un programa específico de entrenamiento de fuerza. Además, los ciclistas que deseen iniciarse en el entrenamiento de fuerza deben enfocar su rutina en los ejercicios de piernas y en la resistencia de la parte central del cuerpo (core).
Por lo tanto, debes asegurarte de realizar tu entrenamiento de manera correcta y efectiva, aunque lograrás ver los cambios en los días que no estés en la bicicleta. Después de todo, es posible que la solución para eliminar los calambres de manera definitiva se encuentre escondida en el levantamiento en las pesas.