Es un básico del cuidado de la piel masculina. El aftershave cumple la importante misión de restaurar y devolver el equilibrio a tu piel tras la agresión que supone el afeitado.
El paso de la cuchilla produce una ligera erosión de las células cutáneas externas, abre los poros e incluso puede provocar pequeñas lesiones y cortes. La función de este cosmético, al que no debes renunciar, es precisamente minimizar esos daños inevitables, proporcionándote, además, hidratación, suavidad y frescor en el rostro.
Mucho ha cambiado la cosmética específica para hombres durante las últimas décadas y, hoy en día, los aftershave disponibles en el mercado poco tienen que ver con los primeros que salieron que contenían una alta cantidad de alcohol, algo de fragancia y poco más.
En la actualidad, tienes una gran variedad de productos para después del afeitado que no solo reparan tu piel sino que son capaces de ayudar a cuidarla en profundidad, siempre que elijas el que mejor se adapte a las necesidades concretas de esa delicada piel de tu cara.