Así que la próxima vez que estés en medio de una multitud buscando a la persona de tus sueños y te fijes en su mirada, en lo trabajado de su cuerpo o lo bien que huele, recuerda que tu cuerpo estará dándote señales en busca de los organismos más sanos y capaces de concebir, para involucrarte en la trampa más perfecta y placentera que inventó la evolución para mantener la vida en la Tierra, el sexo.
Fuente: Cultura Colectiva