Los cuatro pilares fundamentales del Tantra son: pensar únicamente en el presente y disfrutar el momento, aceptar a los demás y a uno mismo tal y como son, expresar lo que se piensa y se siente durante el acto y seguir un movimiento armónico y fluido. Controlar la respiración y sincronizarla con la de tu pareja también es muy importante.
El sexo tántrico enseña cómo vivir el deseo con complicidad, naturalidad y lentitud, prestando toda la atención en todo gesto de la pareja. Es valorar cada beso, cada caricia y cada mirada que, estando completamente relajados, se perciben mucho mejor. Estos dos son unos pequeños ejercicios introductorios en pareja para intentar fundir vuestros cuerpos en uno solo.
1. Abrazaos con espontaneidad, como hacéis normalmente, durante unos 3 minutos. Dejaos llevar, cerrad los ojos y observad cómo os sentís. Ahora alejaos y, siempre uno frente al otro, saludaos con la cabeza, manteniendo una mano sobre el corazón. Id acercándoos lentamente, mirándoos a los ojos, tratando de manteneros relajados y respirando profundamente.