Por otro lado están los helados con una base rica en leche y/o nata. Fíjate en la composición cuando vayas a elegir, y si están elaborados con leche desnatada o en vez de azúcar llevan edulcorante contendrán un menor porcentaje de grasa y calorías. Un tipo de helado que se asemeja mucho a las características anteriores es el helado para diabéticos.
También es bueno que sepas que no todos los sabores contienen las mismas calorías, hay ciertas diferencias. Los sabores frutales son más saludables que los compuestos a base de vainilla o chocolate.
Si te gusta la cocina siempre es mejor elaborar tus propios helados, así sabrás a ciencia cierta la cantidad de calorías y azúcares que ingieres. Anímate y prueba, no es tan difícil como piensas. Procura prescindir de topping y salsas que están ahora muy de moda, sólo conseguirás incrementar las calorías.
Y ya sabes, todos los extremos son perjudiciales, permítete un heladito de vez en cuando. Está demostrado que disminuye la ansiedad y aumenta la calidad de vida en enfermos con patologías avanzadas, por la sensación de felicidad que provocan.