“Creemos que la presencia de otro ratón podría ser vista como un competidor por los recursos limitados, esto es, un aumento de la motivación para buscar comida, lo que representa un hallazgo que ningún estudio ha indicado hasta ahora”, explica Michael J. Krashes, líder del estudio.
Los investigadores creen que estos resultados arrojan luz sobre cómo han evolucionado los animales y los seres humanos: “Nuestra existencia continuada, junto a la de otras especies, nos ha motivado a seguir una serie de comportamientos, todos gobernados por nuestro sistema nervioso”, finaliza Krashes.
El estudio ha sido publicado en la revista Neuron.
Fuente: Muyinteresante.es