La artista plástica húngara Kati Verebics nació en 1980 y estudió Bellas Artes en Budapest, donde vive y trabaja.
Pinta principalmente óleo sobre lienzo aunque disfruta mezclando diferentes técnicas, como la acuarela o el collage, sobre los paneles. Encontramos en su obra erótica tiene paralelismos tanto con el clasicismo como con el Shunga japonés.
«Debemos estar preparados para arder en nuestro propio fuego. ¿Cómo podrías renacer sin habernos antes convertido en cenizas?»
–Nietzsche
Sigue leyendo en Cultura Inquieta