La forma correcta de hacerlo es empezando siempre por los poliarticulares. La explicación es sencilla. Si trabajas de manera aislada y de forma intensiva un músculo lograrás su fatiga y, lógicamente, a continuación, no puedes pedirle que «entrene con el grupo» exigiéndole el mismo rendimiento.
Un ejemplo claro es el entreno de pectorales en el que intervienen músculos y articulaciones diversas. El orden de una serie adecuada sería:
1. Press banca con carga (ejercicio poliarticular).
2. Press de hombro con mancuerna (ejercicio poliarticular complementario).
3. Curl tríceps (ejercicio monoarticular).
El número de series y repeticiones, así como el peso, dependerá de tu propia forma física y del nivel de entreno, siempre teniendo en cuenta que el mayor peso debe centrarse en los ejercicios poliarticulares.