3. Estómago distendido. Esto ya no es un síntoma de uso de esteroides, sino de abuso, incluso de hormona de crecimiento. Tu cuerpo pierde la forma y pierdes esa cintura estrecha y nunca puedes recuperarla, lo que además no es estético ni bonito. El propio Arnold defendió recientemente la necesidad de recuperar la finura y las formas bonitas en la cintura en las competiciones del más alto nivel.
4. Ginecomastia. Esta patología es simplemente una condición en la que el pecho del hombre comienza a parecer el de una mujer; como indica la etimología de su propio nombre (ginecomastia: pecho de mujer). Muchísimos esteroides están derivados de la testosterona, por lo que se convierten en estrógenos vía aromatasa. Este proceso causa una acumulación de estrógenos en el cuerpo, los cuales se unen a los receptores de dicha hormona en el tejido mamario produciendo ginecomastia.
5. Acné y manchas. Puede provocar acné y quistes, así como piel y pelo grasiento. Esto suele ser más prominente en la espalda y los hombros. La testosterona tiene un gran efecto sobre las glándulas sebáceas y no se puede hacer mucho al respecto, por lo que los usuarios de esteroides tienen manchas en la espalda y otras veces en otros lugares.
Conclusión final
En esta página, dedicada al deporte y a la salud, desde luego jamás haremos apología del uso de esteroides anabólicos, y por ello era quizá el momento de tratar de distinguir a un consumidor de un no consumidor, aun teniendo en cuenta que los fármacos se usan habitualmente en el deporte de más alto nivel, sobre todo en el culturismo. Asimismo, tampoco diremos si son más o menos malos que otro tipo de drogas, ya que hemos enlazado un artículo arriba en el que hablamos de sus efectos secundarios. Que cada cual juzgue por si mismo y sea libre de hacer con su cuerpo lo que quiera.