Pero han sido más precisos aún. Las parejas cuyos miembros están separados por 5 años, tienen un 18% más de probabilidades de separarse que una pareja que tiene la misma edad. Si la diferencia es de 10 años, la probabilidad sube hasta el 39%. Y si ya se pasa a 20 años de diferencia, la pareja está sentenciada: tiene un 95% de posibilidades de terminar. Imagina si superan los 20 años…
Siempre hay casos. Cada pareja es un mundo y hay románticas excepciones hasta en Hollywood. Además, al final existen muchos más factores que no tienen que ver con la edad o, al menos, no directamente y que pueden afectar a la hora de una ruptura: tener hijos o no tenerlos, la situación económica y laboral de los dos… Pero según este estudio sí hay una diferencia de edad ideal que garantiza una mayor longevidad en pareja. ¿Cuál es? Llevarse un año entre los dos. En este caso, las probabilidades de separación se reducen hasta un 3%.