Praga
Desde hace mucho tiempo la capital de la República Checa está considerada como una de las ciudades más bonitas de todo el mundo. Su casco histórico fue declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad en 1992 y es una ciudad en la que se respira romanticismo, sobre todo cuando llega la noche. Algunos planes ideales para enamorados es pasear desde su castillo hasta la Plaza de la Ciudad Vieja cruzando por el Puente de Carlos o visitar el monte Petrin y subir hasta su torre de 60 metros de altura, un mirador de estructura similar a la Torre Eiffel, donde podrás disfrutar de una increíble panorámica de la ciudad.
Viena
Viena es una de las capitales más antiguas de Europa por lo que cuenta con un importante patrimonio artístico. Durante el siglo XIX fue una de las grandes cunas musicales del mundo y sigue siendo un lugar idóneo para disfrutar de una velada en la ópera. Además, la ciudad también parece estar hecha para dar paseos románticos y cuenta con una arquitectura imperial, carruajes de caballos y el esplendor de palacios y museos.